La Ventana.

Quiere acabar con todo. La duda ya no es sólo una tos, tampoco una fiebre, ya es algo que se tiene que extirpar. Las cajetillas de cigarrillos no son suficiente, no para de darle vueltas a la cabeza, sólo desea sacar sus pensamientos y dejar el casco vacío, poner en un embalse todo aquello que le causa dolores de espalda, migraña, eso que no permite que sus rodillas sean normales (porque no quieren caminar más) ni las rodillas ni las piernas en sí saben dónde ir. ¿ Será que vuelvo a casa ? –Piensa León. Y pasa el tiempo, sigue su contienda con las decisiones que son más filosas que cualquier arma blanca. No fue hace mucho que León decidió alejarse de su hogar. No hablamos de su casa paternal; hablamos del sitio donde convivía con su chica, esas llamadas musas . Lo decidió por ser buen escritor, también cabe la posibilidad que lo hizo para encontrarse consigo mismo. La verdad es que él es una montaña rusa y creo yo; ésta es más estable. Dejarle ha sido duro, una prueba, una j...